¡UN HUEVO DE DINOSAURIO!
Qué día de sorpresas ha sido hoy.
Además de las ruedas que nos ha regalado Cuscús, también hemos encontrado en clase un huevo de dinosaurio.
Hemos estado investigando cómo cuidan los dinosaurios a sus crías y hemos descubierto que le daban calor para que pudieran nacer, los incubaban.
Nosotros no somos dinosaurios y no podemos hacer eso, pero sí podemos darle calor metiéndolo en agua calentita.
Así lo hemos hecho y lo hemos metido en un tarrito y colocado sobre una mesa.
Hemos trabajado mucho las normas para atender bien al huevo dinosaurio: no tocarlo, no mover la mesa, no tirarlo al suelo, etc. Solo así podremos ir viendo como cada día va a crecer y crecer hasta que rompa su cascarón y pueda nacer.